Serie Técnica Número 21, abril 1997

La caña de azúcar extrae grandes cantidades de nitrógeno (N) del suelo; sin embargo, la extracción depende de la variedad de caña, de las características del suelo, de las condiciones climáticas y del manejo del cultivo. Evaluaciones realizadas en el Centro de Investigación de la Caña de Azúcar de Colombia (CENICAÑA) con la variedad CC 83-25, cosechada a los 13 meses de edad, permitieron determinar que por cada tonelada de tallos molederos producida se extraen del suelo 1.53 kg de N. Es decir que para una producción media de 132.4 t/ha, propia de la parte plana del valle del río Cauca, se puede estimar la extracción total por parte del cultivo en 203 kg de N/ha; pero como los cogollos, las yaguas y las hojas quedan en el campo como residuos de cosecha, la extracción real de N sería de 93 kg de N/ha, la cual corresponde a los compuestos nitrogenados que se encuentran en los tallos molederos transportados a la fábrica.
La industria azucarera colombiana está ubicada casi totalmente en la parte plana del valle del río Cauca. La mayoría de sus suelos son de origen aluvial, franco-arcillosos y con contenidos medianos de materia orgánica; el 72% de los suelos presentan contenidos de materia orgánica entre 2 y 4%.
Las exigencias nutricionales del cultivo de la caña de azúcar y los contenidos medianos de materia orgánica de los suelos del valle del río Cauca hacen que las mayores limitaciones en cuanto a la fertilidad del suelo estén relacionadas con el N. Por esta razón, la investigación sobre la fertilización de la caña de azúcar realizada en los ingenios azucareros colombianos localizados en la parte plana del valle del río Cauca se ha encauzado hacia la determinación de las dosis, las épocas y las fuentes de N
más apropiadas para las variedades más importantes que se siembran en los diferentes grupos de suelos de esta región.